EUCARISTIA 50 AÑOS DE VIDA

MONICIÓN:

La vida es el mayor regalo que hemos recibido. Y por él, hay que dar continuamente gracias a Dios.  No importa cuántos años sean, siempre es una buena oportunidad para mirar al cielo y decir: “Gracias Dios mío por esta vida, gracias por existir”.

Te agradezco inmensamente por esta vida tan llena de cariño que me has regalado, porque me has permitido ayudar a otros y porque todos a quienes amo, están llenos de vida y de salud.  Desde lo más profundo de mí ser, te agradezco y aprecio la vida que me has dado.

PETICIONES: A DIOS QUE ES FUENTE Y ORIGEN DE LA VIDA, PRESENTEMOS NUESTRA SÚPLICA CONFIADA DICIENDO:

“DIOS PADRE, DADOR DE LA VIDA ESCÚCHANOS”

1.   Jesús que eres PASTOR, te pedimos por tu Iglesia para que siga unida en un solo rebaño.

2.   Jesús que eres la PAZ, te pedimos para que todos podamos encontrar serenidad en nuestros corazones.

3.   Jesús que eres  ALEGRIA, te pedimos que nos enseñes a irradiar la verdadera alegría de ser cristianos.

4.   Jesús que eres la VERDAD, enséñanos a ser transparentes, para que pueda verse detrás de nosotros al Dios escondido que llevamos dentro.

5.   Jesús que eres MAESTRO, enséñanos a ser instrumento de tu gracia; y que de tantas gracias que pasan por nuestras manos, algunas se nos queden pegadas.

6.   Jesús que eres VIDA, te agradecemos estos “50 AÑOS” de LUZ MARIA y te pedimos le des muchos más, para que pueda seguir compartiendo con otros el verdadero significado del amor y de la vida, y que pueda cumplir su labor aquí en la tierra.  Déjala ser un instrumento tuyo para llevar paz y consuelo a quienes lo necesiten.

ACCIÓN DE GRACIAS:

Señor, hoy quiero darte las gracias por el maravilloso regalo de la vida, gracias porque haz trazado mi camino y me has conducido con amor de Padre, me has tomado de la mano aunque muchas veces no percibí tu presencia a mi lado.

Señor, enséñame a  vivir intensamente este tiempo que me regalas hoy, que el AMOR esté presente en mis palabras y actitudes; que con mi vida pueda gritar al mundo: SOY FELIZ AL SABER QUE EXISTO.

 SEÑOR… Te doy gracias por las personas presentes en mi vida, aquellas que han sido compañía en mis momentos tristes, que me han animado cuando todo parecía oscuro a mí alrededor, que han sido estímulo en los triunfos y me han ayudado a ser mejor.  Gracias por las personas que me han aceptado como soy.